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Los Guane eran agricultores. Los hombres preparaban la tierra, pero eran las mujeres, las encargadas de la siembra, cuidado y recolección de la cosecha.

 

Su principal cultivo era el Maíz o “Aba”, base de su alimentación. También cultivaban: yuca, plátano, arracacha, batata, tomate, ahuyama calabaza, frijol. La papa o “Jomi” era otro alimento importante. Balanceaban su alimentación con frutas: aguacates, piña, guanábana, cocos y dátiles.

 

Con la llegada de los españoles se introdujeron en la dieta de los Guane, la caña de azúcar, trigo, cebada, banano y café. También trajeron animales como cerdo, cabras, ovejas, vacas y gallinas

 

La interrelación ancestral Maíz/Guane representa la rica herencia gastronómica y cultural de los patiamarillos. Para los Guane, el maíz era  un regalo divino que consumían en diferentes formas. Preparaban la exquisita “mazamorra” o “SUQUE”, fabricaban el “FUN” o pan en forma de deliciosos bollos o “BUN”, la sabrosísima masa de maíz o arepa a la cual daban el nombre de “TIJITAFUM”. También lo preparaban con dulce natural.

 

El maíz también era el componente de la “Chicha: bebida para nuestros varones”. La  consumían en grandes cantidades en todas las celebraciones.

 

Los hombres eran responsables de la caza y la pesca. Pavas, conejos, perdices, venados, insectos y pescado integraban la alimentación.

 

Las hormigas “culonas”, era cultivadas. Los Guane tenían “corrales cercados por hojas anchas” para criarlas, las amasaban para hacer una especie de pan y  las almacenaban en calabazos.

 

Barichara, como toda la región santandereana se ha caracterizado por su variada y deliciosa gastronomía, en la que intervinieron diversas culturas. Los indígenas Guane aportaron todas las preparaciones basadas en el maíz y los alimentos envueltos en hojas de plátano. Los africanos esclavos aportaron los fogones, asados y modos de preparar animales de caza. Los alemanes sus embutidos y salamis.  Los españoles, sus capones y jamones. Y los franceses su técnica innata. Esta combinación creo la cultura culinaria de la cocina Santandereana.

 

El Ministerio de Cultura en sus publicaciones, ha resaltado un grupo importante de manifestaciones culinarias populares de Santander, donde se destacan los platos emblemáticos y de identidad como: las hormigas culonas y el mute, La carne oreada, caldo con huevo y papa, cabro con pepitoria, pichón, sancocho, ruyas, arepa de maíz pelado, bollos, tamales, chicha, guarapo, masato, sabajón, bocadillos, obleas, dulces, quesos, el piquete, la mestiza, entre muchos otros.

 

Los turistas pueden disfrutar en varios restaurantes tradicionales, de los platos típicos preparados por Sabedores-cocineros que siguen utilizando las mismas técnicas que heredaron de madres y abuelas. También se pueden encontrar modernas y deliciosas propuestas gastronómicas con base ancestral tradicional-santandereana.